La más pequeña de las islas, junto a la costa de Bayahíbe, Catalinita se destaca por sus aguas cristalinas durante todo el año y su abundante vida marina y arrecifes.
A La Caleta, una población contigua a La Romana, van a nadar los lugareños en los días calurosos de verano; pero, sobre todo, los atrae el pescado frito con plátano o yaniqueque (masa de harina frita) y una cerveza helada, justo en el mar. Tiene sectores de arena mezclada con piedras y gravilla.